¿Te imaginas que alguien te vendiera un yogur caducado argumentando que el sabor es nuevo e impredecible?, suena a locura ¿no?, pues no, al menos en fotografía, esto es algo que puede verse referente a las películas.

Antes, si nos encontrábamos un carrete caducado o que había pasado por los rayos x de un aeropuerto sencillamente nos resistíamos a usarlo pues sus cualidades podían haber cambiado y no nos interesaba. Esa es precisamente la razón por la que en nuestros tiempos usar carretes caducados, resulta para algunos de lo más divertido, por lo inesperado del resultado.

La degradación que se ha producido con el tiempo en la película hará que los colores sean más tenues y los contrastes menores.

En esta página concretamente se venden en paquetes de tres, con 24 exposiciones cada uno y una sensibilidad de 200 ISO, pero seguro que puedes hacerte con más variedad con un poco de tiempo y navegando por internet.

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